CÓMO EXTRAER EL PODER DE LA PALABRA DE DIOS
CÓMO RECIBIR LA LLENURA DEL ESPÍRITU SANTO
SIETE PRINCIPIOS PARA EL CRECIMIENTO ESPIRITUAL
Texto Principal: Santiago 1:18-25; 2 Timoteo 2:15.
Introducción: (1 Pedro 2:2) “Desead como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación”.
LA NUEVA VIDA EN CRISTO.
Nuestra nueva vida comenzó cuando aceptamos al Señor Jesucristo como nuestros único Señor y Salvador personal. La Biblia dice: (Romanos 10:9-10) “Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación”.
- Tenemos la naturaleza divina. Dios nos impartió Su Vida -la Naturaleza divina-, fuimos hechos la nueva creación en Cristo por la regeneración de nuestro espíritu que estaba muerto en delitos y pecados (Efesios 2:1).
- A partir del Nuevo nacimiento, comienza el crecimiento espiritual.
PRINCIPIOS PARA EL CRECIMIENTO.
El crecimiento espiritual es un proceso que avanza en la medida que obedecemos los principios establecidos en la Palabra de Dios.
- Lea y medite en la Palabra de Dios diariamente. (Romanos 10:17) “Así que la fe es por el oír, y el oír, por la Palabra de Dios”.
- La Palabra de Dios es el alimento para el alma (1 Pedro 2:2).
- Memorice por lo menos un versículo de la Biblia cada día (Salmo 119:11) “En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti”.
- Persevere en oración. La oración es un privilegio, es la voz de la fe. Orar es estar en la presencia de Dios y disfrutar de su bondad.
- No se preocupe, presente sus peticiones delante de Dios (Filipenses 4:6).
- Pida con fe, no dudando (Santiago 1:6); (Mateo 7:7).
- Comparta el mensaje del Evangelio con otras personas (Ezequiel 3:18).
El crecimiento espiritual no solo requiere del alimento (estudio bíblico), sino también de ejercicio.
- Trabaje para Cristo. La tarea que Cristo nos encomendó es la de predicar el evangelio a toda criatura (Marcos 16:15).
- Como representante de Dios aquí en la tierra, minístrele en el nombre del Señor Jesucristo sanidad y liberación a las personas necesitadas (Marcos 16:17-18).
- Evite las malas amistades. Evite las amistades con las personas que no tienen temor a Dios, que son malas. No os unáis en yugo desigual con los incrédulos (2 Corintios 6:14-17).
- No lea libros cuyo contenido se oponga a los principios y valores que están escritos en la Biblia. No llene su mente de pensamientos malos. (Salmo 1:1-2).
- Establezca las relaciones de amistad con personas de fe.
- Congréguese. (Hebreos 10:25).
- Asista a la iglesia no como religioso, sino como un hijo inteligente que va a alabar y adorar a Dios y a recibir la instrucción de la Palabra de Dios, así será entrenado para vivir la vida cristiana victoriosa.
- Sirva al Señor con alegría (Salmo 100:2).
- Dé con alegría para la expansión de la obra del Señor. (2 Corintios 9:7).
- Cuando Dios nos pide algo no es para despojarnos sino para que la ley espiritual de la siembra y la cosecha se active en nuestra economía. (Hechos 20:35).
- Los diezmos son la décima parte de lo que ganamos, esa es la parte que le pertenece a Dios. (Levítico 27:30-32).
- La ofrenda es diferente a diezmo, es la parte que voluntaria y generosamente depositamos en la iglesia para honrar a Dios y que se convierte en la semilla para nuestra prosperidad. (2 Corintios 9:6-7).
- Siga creyendo aunque las circunstancias sean difíciles. El hecho que seamos hijos de Dios, no quiere decir que nunca más tendremos luchas, tentaciones y hasta persecuciones. Si las circunstancias son adversas, sigamos creyendo (1 Timoteo 6:12).
- Porque Dios es nuestro refugio. (Salmo 32:7) “Tú eres mi refugio; me guardarás de la angustia; con cánticos de liberación me rodearás”.
- Porque la presencia de Dios está en nosotros. (Isaías 41:10).
- Porque somos más que vencedores. (Romanos 8:37) “.
Conclusión. “Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús” (2 Corintios 2:14).