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¿Cómo curar la soledad?
La Biblia habla de los diferentes niveles de las finanzas

Cuando leemos, meditamos y nos dejamos persuadir por la Palabra de Dios, muchas de las viejas ideas, las creencias negativas, la mentalidad de pobreza son sacudidas y sustituidas por los pensamientos de Dios. Los pensamientos de Dios son verdaderos, eficaces e inmutables. Recuerde que la Biblia es la Palabra de Dios, son sus pensamientos para sus hijos. Usted es un hijo legítimo de Dios.
La Biblia habla de los diferentes niveles de las finanzas, en uno de ellos usted se encuentra en este momento. Mirémoslos:
- Escasez. Es cuando sus recursos no son suficientes para pagar las deudas y cubrir las necesidades de la familia.
- Suficiencia. Es cuando sus ingresos dan para comer, o para que el negocio se mantenga, pero no le queda nada para sembrar en la obra de Dios, y mucho menos para pasear, invertir o darse algún lujo junto con su familia.
- Abundancia. Es cuando usted recibe lo suficiente para cubrir todas sus necesidades, puede invertir y expandir su negocio, puede sembrar en el Reino de Dios, bendecir a otras personas y aún le sobra para ahorrar y pasear.
No sé cuál es su condición financiera en este momento. No sé en cual de estos tres niveles está ubicado; pero lo que sí sé es en cuál de ellos le gustaría vivir. Y estoy seguro en cuál de ellos Dios quiere que usted viva, porque (Proverbios 21:5) dice: “Los pensamientos del diligente ciertamente tienden a la abundancia…”.
Lo que este versículo dice es que si no somos vagos, perezosos o masoquistas; nuestros pensamientos tienden de manera natural a las riquezas y a la prosperidad. Dios nos hizo así.
El Señor Jesucristo dijo: “El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y la tengan en abundancia”. El Señor Jesucristo afirmó que Él vino para que tuviéramos vida y la tuviéramos en abundancia (Juan 10:10).
Las Sagradas Escrituras enseñan en (1 de Timoteo 6:17) que nosotros debemos poner toda nuestra confianza en Dios “que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos”.
La Biblia dice en (Jeremías 31:14) “El alma del sacerdote satisfaré con abundancia, y mi pueblo será saciado de mi bien”.
Usted es parte del pueblo de Dios y es un sacerdote del Nuevo Pacto; por lo tanto usted debe apropiarse de esta Palabra.
El (Salmo 23:5) dice que en los tiempos de angustia Dios hace que nuestra copa rebose. Esa Palabra significa que la copa ha recibido más de lo que necesita para estar llena.
Dios se alegra con la prosperidad y la abundancia de sus hijos, lea (Deuteronomio 30:9) “Te hará Jehová tu Dios abundar en toda obra de tus manos, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu bestia, en el fruto de tu tierra, para bien; porque Jehová volverá a gozarse sobre ti para bien”.
Es posible que su vieja mente religiosa le estará diciendo ahora, bueno, eso es en el Antiguo Testamento, yo no puedo aplicar esa Palabra de prosperidad en mi vida. Pues bien, renueve su mente. Olvide las erróneas enseñanzas que ha recibido hasta ahora.
No importa si usted las recibió de sus padres, de su maestro de la Biblia, del líder de su antigua denominación, de un concilio de teólogos o de un doctor en economía; son falsas. Recuerde: El justo vive por la fe en la Palabra de Dios (Romanos 1:17).
Lea lo que dice la Biblia en (2 de Corintios 9:8) “Poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra”.
La palabra de Dios no volverá vacía, la Palabra es íntegra e inmutable. Si Dios lo dice, Él lo hará.