LECTURA BÍBLICA (Isaías 55)

VERSÍCULO DE LA SEMANA ANTERIOR: “Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma, y dará vigor a tus huesos; y serás como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan”. (Isaías 58:11)

VERSÍCULO PARA MEMORIZAR : “Pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán” (Isaías 40:31).

PREGUNTAS INTRODUCTORIAS

Según (Efesios 5:25-26) ¿Por qué el Señor Jesucristo se entregó a sí mismo por la iglesia?

• R/ PARA SANTIFICARLA

¿Cómo es purificada la iglesia? (Efesios 5:26) 

• R/ EN EL LAVAMIENTO DEL AGUA POR LA PALABRA

¿Cuál es el fin de la purificación de la iglesia? (Efesios 5:27) 

• R/ QUE SEAMOS UNA IGLESIA GLORIOSA, SANTA Y SIN MANCHA

¿Cómo deben amar los maridos a sus mujeres? (Efesios 5:28)

• R/ COMO A SU MISMO CUERPO

Según (Efesios 5:29) ¿Qué hace el Señor Jesucristo con Su iglesia?

• R/ LA SUSTENTA Y LA CUIDA

Según (Efesios 5:30) ¿Qué somos los creyentes para Cristo? 

• R/ MIEMBROS DE SU CUERPO, DE SU CARNE Y DE SUS HUESOS

NUESTRA COMUNIÓN VERDADERA ES CON EL PADRE, EL HIJO Y EL ESPÍRITU SANTO. 

Introducción:  Quiero comenzar con una pregunta, ¿usted tiene una comunión o una relación con el Señor? Es sorprendente que el enemigo siempre pone en nuestra mente pensamientos de menosprecio pensando que el Señor no nos puede usar. 

Seguir a Jesús, es una decisión radical que se debe tomar, es necesario tener sed y hambre por el Señor. 

1. RELACIÓN O COMUNIÓN. 

¿Qué es comunión y que es relación? La palabra relación tiene bastantes significados en la RAE; sin embargo, uno que me llamo la atención es: “Conexión, correspondencia, trato, comunicación de alguien conotra persona.” Las palabras “correspondencia” y “trato” llaman la atención, ¿acaso no todos los seres humanos tenemos un trato con Dios?, pues déjame decirte que sí. Los creyentes y los no creyentes tenemos un “trato”, una “correspondencia” buena o mala para con Dios; sin embargo, no todos tenemos una comunión con Él, pero entonces ¿qué es la comunión? Salmo 25:14 “La comunión íntima de Jehová es con los que le temen, Y a ellos hará conocer su pacto.” Pero si vamos al diccionario hebreo, la palabra “comunión” es “SOD” que significa “compañía, amistad o intimidad”. En otras versiones, dice, “amistad” o “amigo”.

La historia del hijo pródigo, nos da una muestra del amor eterno del Padre celestial para con sus hijos que realmente se arrepienten de su pecado y quieren cambiar su manera de vivir para vivir por y para Dios. El hijo prodigó, no murió apedreado como era ley, no hubo condenación para él, fue recibido por su padre y perdonado y restaurado y hubo fiesta, así es de hecho lo que pasa cuando recibimos a Cristo en nuestro corazón. La gran ventaja de que cuando murió Cristo, la ley ya no nos condena, ya que fue la Gracia la que nos salvó, esa es Gracia la que nos cubre ante Dios y nos salva de morir, porque Jesús murió para que nosotros vivamos, Él ya pagó el precio. La Comunión con Dios es también que recuerdes los sufrimientos y la muerte de nuestro Señor en la cruz. Él fue quien murió, pero quien resucitó triunfante de entre los muertos para darnos vida eterna al creer en Él. Y es que lo más hermoso de todo esto, es que el Espíritu Santo es quien nos da testimonio de esto, porque por medio de Él nosotros fuimos sellados para el día de la redención. 

1. COMO SE PIERDE LA COMUNIÓN 

Ahora bien, a muchas personas no les gusta que sean confrontados porque se “ofenden” y pasa lo mismo cuando se les dice la verdad. Pero Jesús nos enseñó que Él es la verdad y la verdad nos hace libres. Cuando nosotros pecamos estamos desobedeciendo los preceptos o mandamientos que Dios nos ha mandado y vemos en sus Escrituras, pero de pronto dirás “pero ahora vivimos por gracia”. Si, gracias a Dios, el todopoderoso, tenemos la gracia del Señor Jesús, pero asimismo tenemos como ejemplo al Señor quien siempre siguió la ley y nunca pecó. Es necesario que para seguir a Jesús debamos tomar decisiones radicales, pero no quiero que pienses que porque pecaste el Padre te odia, o te rechaza, o te dejó de lado, ni mucho menos, de hecho, como lo dice 1 Juan 2:1 tenemos un abogado quien a través de Él, el Padre ahora nos ve limpios. “Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre a Jesucristo y el justo.” 1 Juan 2:1. La desobediencia nos hace  entorpecer del propósito divino de Dios, de su camino, Él desea que seamos prosperados en todas las áreas de nuestras vidas. Recordemos que el pueblo de Israel es “condenado” por su pecado de adulterio, porque ellos decidieron escoger a otros dioses y no obedecer lo que el Padre tenía para ellos, que de hecho eran bendiciones en gran manera.

¿Qué hace el pecado en nuestra vida?

El pecado nos borra el gozo que solo Jesús nos puede dar, porque el pecado nos roba la confianza. “En esto sabremos que somos de la verdad, y aseguraremos nuestros corazones delante de Él. En cualquier cosa en que nuestro corazón nos condene; porque Dios es mayor que nuestro corazón y sabe todas las cosas. Amados, si nuestro corazón no nos condena confianza, tenemos delante de Dios” 1 Juan 3:19-21

1. El pecado trae culpa “Porque yo reconozco mis rebeliones, y mi pecado está siempre delante de mí” Salmos 51:3
2. El pecado apaga o contrista al Espíritu Santo “Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención.” Efesios 4:30
3. El pecado trae daño físico, no significa que fue Dios quien causó el daño, no. Recordemos que el adversario es quien manda las aflicciones al ser humano. “Señor, no me reprendas en tu enojo, ni me castigues en tu furor. Porque tus saetas se han clavado delante de mí, y sobre mí ha descendido tu mano. Nada hay sano en mi carne a causa de tu indignación; en mis huesos no hay salud a causa de mi pecado.” Salmos 38:1-3
4. El pecado causa dolor en el alma y produce temor a nuestra vida. ”Mientras callé, se envejecieron mis huesos, En mí gemir todo el día. Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano; Se volvió mi verdor en sequedades de verano. Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado.” Salmos 32:3-5
5. El pecado desea controlar nuestra vida y nos abre la puerta a otros pecados. “Jesús les respondió: En verdad, en verdad os digo que todo el que comete pecado es esclavo del pecado” Juan 8:34

1. COMO PODEMOS RESTAURAR LA COMUNIÓN

Pero tengo excelentes noticias, por la misericordia de Dios, podemos restaurar la comunión. Y esto es a través del reconocimiento del pecado, confesando el pecado y arrepintiéndonos del pecado. Recordemos lo que dice Romanos 10:9-10 “Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.” Sometiendo nuestros pensamientos a la obediencia a Cristo, podremos superar cualquiera tentación, como consejo personal y que aplico cada día de mi vida, es leer la palabra de Dios, escudriñarla, me hace solo pensar en Cristo, en meditar acerca de lo que Él quiere para mí y como a través de la obediencia Él me puede usar. 

CONCLUSIÓN:  El Señor Jesús quiere que tengamos una comunión con Él, así que recuerda que todos los seres humanos tenemos una relación con Dios, pero muy pocos tenemos una comunión con Él, y para tenerla debemos arrepentirnos, confesar nuestros pecados y reconociendo al Señor que es lo que hemos hecho. Jesús te ama, Él murió por ti y por tus pecados, Él ya no te ve impuro, sino santo y sin mancha, ya no hay condenación en tu vida. “AHORA pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, más conforme al espíritu.” Romanos 8:1