
EL PRINCIPIO ACERCA DE LAS RIQUEZAS

EL PRINCIPIO ACERCA DE LA VISIÓN
NO TE RINDAS, LA VICTORIA DE CRISTO ES TU VICTORIA
LECTURA BÍBLICA: (Romanos 8:28-39)
VERSÍCULO DE LA SEMANA ANTERIOR
“Honra a Jehová con tus bienes, y con las primicias de todos tus frutos; y serán llenos tus graneros con abundancia, y tus lagares rebosarán de mosto” (Proverbios 3:9-10).
VERSÍCULO PARA MEMORIZAR
“Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó” (Romanos 8:37).
PREGUNTAS INTRODUCTORIAS
- Según (Efesios 3:1) ¿De quién era prisionero el apóstol Pablo?
R/ DE CRISTO JESÚS
- Según (Efesios 3:1) ¿Por quienes era prisionero el apóstol Pablo?
R/ POR LOS GENTILES
- ¿Qué le fue dado de parte de Dios al apóstol Pablo los gentiles? (Efesios 3:2)
R/ EL MENSAJE DE LA GRACIA
- ¿A través de qué medio Dios le declaró el misterio de Cristo al apóstol Pablo?
(Efesios 3:3)
R/ A TRAVES DE REVELACION
- ¿Qué escribió el apóstol Pablo brevemente? (Efesios 3:3-4)
R/ EL MISTERIO DE CRISTO QUE DIOS LE REVELO
- ¿Qué fue lo que no se dio a conocer a los hombres en otras generaciones, y a quienes le fue revelado ahora?
R/ EL MISTERIO DE CRISTO, REVELADO AHORA A LOS APOSTOLES Y PROFETAS POR EL ESPIRITU
NO TE RINDAS, LA VICTORIA DE CRISTO ES TU VICTORIA
Introducción: Cada día tenemos batallas, en diferentes áreas de la vida, familia, finanzas, trabajos, pensamientos, salud, hogar, vecinos, ciudades, el mundo; todos los días las tenemos sin distinción alguna. Por lo tanto debemos estar conscientes de que estamos involucrados en una guerra. Y saber que una de las principales estrategias de Satanás ha sido cegar nuestros ojos frente al conflicto en que estamos, y de esta manera hacer que estemos impotentes contra sus ataques, porque nuestra guerra no es contra las personas. Es contra el diablo y sus espíritus de maldad. Es en el ámbito espiritual.
I. ACUDIR AL LLAMADO
El antiguo Testamento nos cuenta de Débora qué dirigió a los israelitas en calidad de profetisa y juez, pero también era esposa, (esposa de lapido dice la Palabra) y por supuesto era madre. Ella aparece en e libro de los Jueces Cap. 4 y 5. Ella vivió en uno de los momentos más difíciles de Israel, la gente estaba amedrentada con miedo, ansiedad, pobre, en manos del enemigo, de los problemas. Y ella estando en sus labores diarias atendió el llamado de Dios, no era una tarea que desarrollara ella misma, pero es a Débora a quien se le entrega la Palabra de Sabiduría sobre el plan a seguir y sobre la victoria de Israel sobre el enemigo.
Muchos hemos sido llamados como ella, a levantarnos para pelear por nuestra familia, finanzas, trabajo, pensamiento, salud, hogar, ciudad, etc. Pero por desconocimiento de la Palabra no acudimos a ese llamado, porque no sabemos cómo llevarlo a cabo, más bien tomamos la actitud de relegarnos, de dejar que otros peleen, que otros enfrenten las dificultades, que otros resuelvan o lo que es peor nos rendimos. Pero Dios no quiere que actuemos de esa manera, porque él sabe que podemos obtener el descanso, la paz y el gozo que deseamos.
II. LAS ARMAS DE NUESTRA MILICIA
1 Corintios 10:4 Las armas con las que luchamos no son de este mundo, sino que tienen el poder de Dios para destruir las fortalezas del enemigo. ¿Cuáles son esas armas?
- FE
1 Juan 5:4 PDT porque todo aquel que sea hijo de Dios vence al mundo. Nuestra fe nos ha dado la victoria sobre el mundo. La fe es la fuerza, la habilidad que Dios le ha dado para superar los momentos difíciles, vencer al enemigo y posea todo lo que Dios ya le proveyó en Cristo.
- LA PALABRA HABLADA
En la Biblia dice que nuestra arma para la victoria en las batallas de la vida es «la espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios» (6:17). La Palabra de Dios, cuando es hablada por nuestras bocas se convierte en una arma poderosa en contra de la cual Satanás no puede defenderse. A medida que hablemos la Palabra de Dios con autoridad, venceremos a Satanás y sus demonios. Recuerde que la fe de Dios: 1) Cree la Palabra, 2) Habla la Palabra, 3) Ve a la Palabra haciendo señales y prodigios.
- LA ORACIÓN
La oración es la batalla en sí misma, con la Palabra de Dios como nuestra arma principal, que empleamos en la lucha contra satanás. Efesios 6:18 Orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos.Mientras nos mantenemos orando en todo tiempo, veremos las fortalezas de Satanás, y seremos personas cada vez más valientes en la batalla.
- EL NOMBRE DE JESÚS
Filipenses 2:10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra… Jesús nos dio su nombre para que lo usemos en su lugar. Marcos 16:17 Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; El hecho de estragarnos su nombre como un poder legal muestra la confianza del Señor en nosotros, en que, actuando en su nombre, obtendremos los mismos resultados sobre el enemigo como él lo hizo estando aquí en la tierra. Cuando usamos el nombre de Jesús tenemos esa misma autoridad en la tierra.
- SANGRE DE JESÚS
Uno de los impedimentos para ser un poderoso guerrero es considerar que no estamos aptos para la batalla. Pero por medio de la Sangre del Señor Jesús, nosotros estamos en paz con Dios, libres del pecado, de la culpa, de la condenación, tenemos paz, confianza, protección y nos restauró a la vida de Dios a través del nuevo nacimiento, por medio de ella somos más que vencedores. Apocalipsis 12:11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos.
III. LA VICTORIA DE CRISTO ES NUESTRA VICTORIA
- Con su resurrección el Señor obtuvo una posición de poder que nos delegó a nosotros. Efesios 1:18- 23 alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos, y cuál la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fuerza, la cual operó en Cristo, resucitándole de los muertos y sentándole a su diestra en los lugares celestiales, sobre todo principado y autoridad y poder y señorío, y sobre todo nombre que se nombra, no sólo en este siglo, sino también en el venidero; y sometió todas las cosas bajo sus pies, y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia, la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo. Esto quiere decir que si somos el cuerpo de Cristo, somos sus pies también, la posición de Cristo es la nuestra, es decir sobre nuestros enemigos, sotanas y sus demonios están bajo nuestros pies.
- Con su resurrección el Señor Jesucristo obtuvo a victoria sobre sábanas y los demonios de maldad. El apóstol Juan nos dice que el Señor Jesucristo proclamó Su victoria. Apocalipsis 1:18 Y el que vivo, y estuve muerto; más he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades. Jesús tiene en Su mano las llaves de autoridad que Satanás había robado en el jardín del Edén cuando engañó a Adán y Eva. Las llaves, representan autoridad, gobierno y ahora están en las manos del Señor Jesús, pero lo mejor, Jesús tomó aquellas llaves y no las dio a nosotros, Su iglesia.
- Somos más que vencedores. Romanos 8:37. Pero en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. “Más que vencedores”. Gr. jupermikáo. obtener un triunfo total, ganar completamente una batalla; tener una victoria abrumadora, vencer de manera arrolladora, literalmente «somos hipervencedores». Por cuanto Cristo venció nosotros vencimos.
Conclusión: Tenemos todo para vivir la vida victoriosa. Nuestro Padre Dios no ha cambiado. Así como Dios les dio la victoria a Débora y nuestros antepasados por donde quiera que fuesen, de la misma manera obrará a favor nuestro en cada momento difícil por el que pasemos. “Mas a Dios gracias, el cual no lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús…” 2 Corintios 2:14.